Readaptación

Este post es, por petición popular, para las que saben lo que se siente al ir y venir de esta isla, para mí más atrapante que el proyecto Dharma.
Hoy he aterrizado de nuevo en Reunión. Salí con el corazón dividido, por culpa de la familia y los amigos que tengo y que me han hecho ponerme a llorar por todos y cada uno de los rincones de Charles de Gaule (ta gueule!), que mira que es grande. Os quiero muchísimo, gracias por estar ahí.
Lee lo que sigue y puede que te haya pasado algo parecido.
He visto ojos brillar por nuevos amores y eso… ni la mastercard; he estado con Miss Ikea en la playita dorando las pieles más codiciadas de Andalucía occidental y oriental; he aprendido alguna que otra técnica de costura nueva sentada con más de 80 años de mujer del siglo XXI; he estado de tapitas inesperadas en el mentidero y sin mentiras, me he reído con Bang-bang de los Picapiedra y Blancanieves en el país de las maravillas, con hada madrina y todo; he visto a "Bea" y he sentido que me sentía allí, tirada en el sofá, como si me hubiera tocado la lotería por lo que tenía al lado; he compartido mojitos y confidencias con dos piedras preciosas de las que ni se rayan, ni se desvalorizan, ni pierden brillo, duran para toda la vida; he comido sushi hasta reventar con tres compis de batallas con los que he compartido muchísimo más que letras y tiempo; incluso he organizado un intercambio intercontinental África-Asia en menos de una hora, y con consecuencias emocionales poco despreciables, ya que cinco minutos de compartir proyectos une más que miles de horas de charla sin sentido...
Mucha gente me ha faltado en vivo y en directo… algún profesional emprendedor de brillante futuro por el que se puja en la capital; alguna sanduguera isleña salerosa y amorosa; mi alma gemela, la eterna viajera cosmopolita, queen of the night y pionera del GPRS; mi terapeuta particular del desierto, con la falta que me hace!!!… y un largo etcétera.
En el próximo capítulo… ¿Qué pasó ese día que llegué? ¿Buenas o malas noticias?
¿Qué pasó con el coche, la casa, el trabajo, las olas, el engendro de cobarde con el que salía (vaya, ya estoy adelantando datos, jeje)?
Estoy bien… y hasta ahí puedo leer…
Continuará en el siguiente post ;)

Pata negra ibérica... ahí estás tú.